Bares escondidos en las azoteas de Benidorm que son auténticos tesoros.
Con vistas panorámicas a la bahía de la ciudad, ofrecen un lugar perfecto para distendidas tardes de relax, bebidas después del trabajo, encuentros con amigos...
Un brindis es el punto de partida para disfrutar de increíbles puestas de sol con unas de las mejores vistas de toda la Costa Blanca.