Sea Trek: Paseo lunar en Benidorm

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Esa es la primera idea que me vino a la cabeza después de probar el Sea Trek: la de un paseo lunar.

Llevo muchos años buceando pero nunca lo he hecho con ninguno de esos antiguos equipos que cuentan con un casco al que se le suministra aire a través de una manguera desde superficie, vaya, la histórica escafandra con la que los buceadores clásicos podían permanecer en el fondo desplazándose a pie. Y tanto ese equipo como los movimientos que nos permiten me recuerdan inevitablemente a los astronautas y a sus lentos y vacilantes paseos espaciales.

Un casco y nada más

Así que el otro día, gracias a la amable invitación de @visitbenidorm acudí junto a Laura #laugarcas al centro de buceo Diving Stones a probar el novedoso sistema de inmersión con el que, hasta los más recelosos y dubitativos de los candidatos a sumergirse pueden hacerlo sin absolutamente ninguna dificultad: el Sea Trek. El sistema no puede ser más sencillo: un casco de gran tamaño a similitud de los clásicos pero con una pantalla que nos permite una completa visibilidad, y que nos colocamos dejándolo reposar sobre nuestros hombros mientras a través de un largo latiguillo llega a su interior el aire almacenado en unas botellas que flotan en superficie. Ni regulador,ni gafas de bucear (si acaso las de vista o las de sol), ni plomos, aletas o jacket. Simplicidad total: sólo un traje corto de neopreno y unos escarpines para caminar bajo el agua mientras respiramos con absoluta normalidad sin ningún cuerpo extraño en la boca como pueda ser una boquilla.
La tremenda sencillez lo hace adecuado para que cualquiera, por muy aprensivo que sea, pueda desplazarse bajo el agua y recorrer tranquilamente los fondos marinos como si se tratara del paseo de un senderista.

Comienza el paseo

La actividad está siempre supervisada por dos buceadores, uno que controla el suministro de aire y con un sistema alternativo si se diera el improbable caso de necesitarse, y otro que nos acompaña por el fondo supervisando nuestra evolución submarina.
No tiene nada que ver con el buceo con botellas en el que el desplazamiento es mediante las aletas tras conseguir la flotabilidad neutra . Aquí andamos, muy lentamente, por el fondo. Tal vez este movimiento tan poco aparatoso invita a los peces a acercarse más a nosotros que cuando nos desplazamos buceando.
Nuestra flotabilidad es ligeramente negativa de modo que si damos un saltito ascendemos un poco y enseguida descendemos lentamente, como hemos visto que experimentan los astronautas.

Completa seguridad

Un paseo especial con un sistema novedoso y muy muy sencillo que puede ser la forma más fácil de introducirnos por primera vez en el mundo submarino en Benidorm ,el destino en el que todo es posible.